En  argentina entre 1853 y 1994,los presidentes cumplían un mandato de 6

años sin reelección inmediata,es decir que no se podrán postular nuevamente

después de cumplir su mandato,y la elección se realizaba por medio del

sistema de Colegio Electoral,lo que quiere decir que lo eligen personas de

ese ámbito.Esto cambió en la presidencia de Menem,en 1994 se reformó la

Constitución Nacional.Desde 1994 la elección es Directa y los mandatos son

de 4 años con reelección inmediata posible.

En argentina a lo largo del tiempo hemos tenido diferentes Presidente

como,Bartolome Mitre 1862/1868 (Primer Presidente de la nacion

Argentina),Hipolito Yrigoyen 1916/1922 (Primer Presidente elegido tras la ley

Saenz Peña),Juan Domingo Peron 1946/1952 y 1952/1955 (en 1949 se

sancionó una nueva constitución que admite la reelección),Eduardo Lonardi

1950/1955 (presidente de facto,asume tras golpe de estado.Se restablece la

constitucion de 1853),Leopoldo Galtieri 1981/1982 (presidente de facto)

Galtieri, quien era general en el Ejército Argentina es conocido por su papel

en la Guerra de las Malvinas, un conflicto bélico que enfrentó a Argentina y al

Reino Unido en 1982. ,El conflicto terminó con la derrota de Argentina, lo que

llevó a la renuncia de Galtieri y a la eventual caída de la dictadura militar en

Argentina;Raul Alfonsin 1983/1989 (asume tras elecciones generales,dando

inicio al periodo democratico actual),Carlos Saul Menem 1989/1995 y

1995/1999 (en 1994 se sanciona una nueva Constitución y es

reelegido),Fernando de la rua 1999/2001,Federico Ramon Puerta 2001/2001

(aume tras la renuncia De la Rúa),Adolfo Rodriguez Saa 2001/2001 (asume

tra la asamblea Legislativa en medio de una crisis política ,Eduardo Camaño

asume tras la renuncia de Saá),Eduardo Duhalde 2002/2003 (asume tras

asamblea legislativa) En el mandato de la Rúa hubo una crisis económica y

financiera en Argentina esta fue llamada  ̈El Corralito ̈. Argentina enfrentó

una crisis económica profunda, caracterizada por una severa recesión, una

alta deuda externa y una crisis fiscal. La situación llevó a un período de

inestabilidad política y económica, con varios presidentes sucesivos en un

corto período de tiempo.Por esto hubo tantos presidente nombrados en poco

tiempo de mandatos;Nestor Kirchner 2003/2007 (asume en elecciones

generales).

DESINFORMACIÓN DURANTE LA GUERRA

Por: Onorato  - Onorado – Tangorra

La guerra de Malvinas de 1982 fue un conflicto entre Argentina y Reino Unido por la soberanía de las islas Malvinas.

Todo comenzó cuando, el 2 abril de 1982, Argentina invadió las islas y Reino Unido respondió con una fuerza naval.Tras intensos combates, Reino Unido recuperó el control de las isla el 14 de junio 1982. Esta guerra fue un episodio crucial en la historia contemporánea de Argentina y del Reino Unido, y la desinformación jugó un papel fundamental en la forma en que se percibió el conflicto tanto en el país como en el contexto internacional.

Durante los primeros días de la guerra, el gobierno militar argentino, bajo la dictadura de Jorge Rafael Videla y luego de Leopoldo Galtieri, utilizó una intensa campaña de propaganda para justificar la invasión de las islas Malvinas. Esta estrategia tenía como objetivo no solo mantener el apoyo popular, sino también desviar la atención de los problemas internos que enfrentaba el régimen, como la crisis económica y las violaciones de derechos humanos.

Esta narrativa, liderada presentaba a las fuerzas armadas argentinas como heroicas y victoriosas. Por lo tanto, la censura fue una herramienta clave; los medios de comunicación estaban bajo control militar, lo que significaba que solo se difundían reportes que favorecían al gobierno. Además, se minimizaban las derrotas y se exageraban los éxitos. Por ejemplo, se afirmaba falsamente que el país había hundido al portaaviones británico HMS Invincible, una afirmación que nunca se corroboró. Estas mentiras alimentaron un fervor patriótico en la población, que sentía orgullo por las "victorias" argentinas.

La propaganda, también utilizó símbolos nacionales para fortalecer el sentido de unidad y orgullo entre los argentinos. También, alimentaban la desinformación con imágenes de soldados ondeando la bandera argentina y se reproducían fragmentos del himno nacional en los medios. Esta táctica buscaba crear un ambiente emocional que justificara el sacrificio de los soldados y reforzará la idea de que estaban defendiendo la soberanía nacional.

Sin embargo, a medida que avanzaba el conflicto, comenzaron a surgir dificultades logísticas y estratégicas para las fuerzas argentinas, que eran ocultadas o minimizadas en los informes oficiales.Por otro lado, la escasez de suministros, la falta de entrenamiento adecuado y las condiciones climáticas adversas tampoco eran temas abordados por los medios controlados por el estado.

Luego de 74 días, el 14 de junio de 1982, las tropas argentinas se rindieron ante las fuerzas británicas y la verdad sobre lo ocurrido comenzó a salir a la luz. Esta revelación de las verdaderas circunstancias del conflicto generó una profunda desilusión entre la población argentina, muchos se sintieron traicionados por un gobierno que había manipulado información para mantener su poder y controlar a la opinión pública.Además, el impacto psicológico fue devastador: no solo se trataba de una derrota militar, sino también del colapso de un mito construido alrededor del patriotismo y del sacrificio nacional. Esta desilusión contribuyó a un creciente descontento social que culminó en protestas masivas contra el régimen militar. Finalmente, esta presión popular llevó a la caída del gobierno militar y al restablecimiento de la democracia en 1983.

En resumen, la desinformación durante la guerra de Malvinas no solo afectó la percepción del conflicto en tiempo real, sino que también tuvo consecuencias duraderas para Argentina. La manipulación mediática sirvió para mantener un control temporal sobre la opinión pública, pero al final resultó contraproducente al descubrirse las verdades ocultas detrás del enfrentamiento bélico. La memoria colectiva sobre Malvinas sigue siendo un tema sensible en Argentina y ha dado lugar a debates sobre patriotismo, verdad histórica y reconciliación con el pasado.